jueves, 24 de enero de 2008

Familia y Valores: la confianza

La confianza en la familia.

El sentimiento de confianza viene apoyado con el hecho de la maternidad y de la paternidad. El niño se confía por completo a sus progenitores por la necesidad absoluta que tiene de protección y seguridad.

La confianza se incrementa y afianza si los padres saben fomentarlas y, más que nada, si se ofrecen ejemplos claros de confianza en la vida cotidiana.
La confianza siempre se apoya con la madurez, sinceridad, generosidad, sencillez y ejemplo constante de recíproca confianza, y que en el hogar son los padres los únicos responsables.

Los padres hemos de ser conscientes de que son las obras, los hechos, las actitudes, más que los discursos, los que nos hacen merecedores de confianza de nuestros hijos. Estas son las actitudes básicas
que facilitan la confianza de nuestros hijos.

- Saber dar tiempo al tiempo, ser tolerantes, saber olvidar, comprender y perdonar.
- No confundir paternidad o maternidad con excesiva blandura y tolerancia. Los hijos necesitan firmeza, disciplina y exigencias razonables. Esto les hace confiar en nosotros.
- Permitir la autonomía, el tomar decisiones y el equivocarse, para aprender de los errores y encontrar el propio ritmo, el propio camino.
- Salvaguardar siempre a la persona y confiar en ella, jamás condenarla. Se ha de criticar las malas acciones, pero dejando a salvo a las personas que la cometieron. Lo que has hecho está mal, es reprochable, pero tú eres bueno, tú puedes hacer el bien y estoy convencido que lo intentarás hasta conseguirlo.

La confianza entre los distintos miembros de la familia.

a) La confianza entre el padre y la madre. La confianza entre los cónyuges es el manantial de todas las demás confianzas en el seno de la familia. La confianza entre los esposos es garantía de casi todo: de
la paz familiar, de una paternidad y maternidad responsable, de amor, de unidad y entendimiento entre los hijos, de la superación de cualquier dificultad y desgracia, de felicidad... Y es que la
confianza entre el padre y la madre, penetra hasta la esencia misma del amor conyugal, que da unidad, fuerza y coherencia a toda la familia.


b) La confianza entre los hermanos es consecuencia directa de la confianza y del amor entre los padres. Los padres que respetan a los hijos, permiten sus diferencias y les alientan a desarrollar lo mejor de sí
mismos, están enseñando y exigiendo a los hijos a comportarse así entre ellos, Las relaciones se hacen cordiales, distendidas, flexibles y tolerantes porque esa es la tónica marcada por los padres
desde la cuna y enseñada día a día, con su ejemplo vivo.

c) La confianza de los padres en los hijos. Una persona cayó durante algún tiempo en profunda depresión al recibir esta respuesta de su hijo de 16 años, a quien reprochaba su falta de confianza:
"Papá, por más que lo intento, no logro confiar en ti, aunque lo deseo, porque tú nunca confiaste ni confías en mí". La verdad que este joven, por sus obras no era merecedor de mucha confianza, pero el amor de este padre hacia su hijo y el consejo de que le ofreciera toda la confianza posible, no tardaron en dar buenos resultados. Estas fueron las palabras del padre, que junto con un comportamiento de plena confianza, le reconciliaron con su hijo: "Tienes razón, hijo, no puedo pedirte que confíes en mí sin haberte dado antes ejemplo, confiando yo plenamente en ti. En adelante trataré de hacerlo. Gracias por haberme hecho reflexionar. Hoy yo he aprendido de ti. Trataré en lo venidero de merecer tu confianza".

d) La confianza de los hijos en los padres. El joven del párrafo anterior recibió un extraordinario ejemplo de humanidad y de grandeza de espíritu de su propio padre. Nunca es más grande el hombre que cuando reconoce sus errores con sencillez, los acepta de buen grado y promete corregirlos. La confianza genera confianza. Ofrece confianza a ese hijo que se encierra en su mutismo y apenas sabes algo de su vida. No te importe dar el primer paso, como dice Tony de Mello: "Antes de cambiar a los demás, cambia tú. Limpia tu ventana para ver mejor."

Consejos para hacer realidad la confianza en el hogar.

1- Decir siempre la verdad llana y simple.
2- Fomentar la naturalidad y espontaneidad en la expresión de pensamientos y sentimientos.
3- Dar ejemplo de respeto a ti mismo y a los demás, y exigirlo a todos los miembros de la familia.
4- No consentir amenazas, chantajes ni intromisiones de unos con otros.
5- Propiciar el diálogo, la generosidad, los intercambios de opiniones, el interés por las dificultades y
problemas de los demás.
6- Pactar unas normas de convivencia discutidas, hechas y aceptadas por todos y reflejadas por escrito para saber a que atenerse en las situaciones de conflicto.
7- Huir del autoritarismo y promover la comprensión, la flexibilidad y la tolerancia mutua, sin caer en el
abuso descarado.

Fuente: www.vitral.org

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante, me sirvio' de mucho. Gracias.
Pdt: creo q la imagen de los hermanos es de los serrano, no?

isayana zamora dijo...

Muy interesante pues la informacion esta buena para un seminario para padres

Anónimo dijo...

Esoo es Buenoo Pq Sirve Para Los Padres Qee pelean Muchoo La Informacion Esta Muy Bn :D